PERIODO DE REFLEXIÓN

Revolución a la vista en el Valencia Basket

Los dirigentes están en proceso de reflexión y las decisiones aún no se han tomado, pero admiten que la pésima temporada exige cambios en materia deportiva

Los jugadores, en torno a Van Rossom, que se despidió tras seis meses sin poder jugar por lesión

Los jugadores, en torno a Van Rossom, que se despidió tras seis meses sin poder jugar por lesión / Miguel Ángel Montesinos

Desde hace semanas, la cúpula del Valencia Basket está realizando una reflexión profunda sobre las causas de que el equipo haya firmado uno de los peores años de su historia, un proceso que se ha acelerado en las últimas horas tras la deshonrosa eliminación en los cuartos de final de la Liga acb Endesa a manos del Barcelona.

La dirección general, liderada por Enric Carbonell, analiza la situación generada en una temporada que empezó como el inicio de un nuevo proyecto, tras el fichaje para el banquillo de Álex Mumbrú con un contrato de tres años, y que ha terminado de manera muy negativa. El Valencia BC ha cerrado el curso 22/23 con su porcentaje de victorias (45 %) más pobre desde el descenso en 1995, problemas y fragmentación en el vestuario y pérdida de adeptos en La Fonteta a poco más de un año para el nuevo pabellón, el Roig Arena.

Los cambios pueden afectar a toda la estructura deportiva

Con estos condicionantes, si bien desde la entidad de Hermanos Maristas se afirma que las decisiones todavía no están tomadas, a día de hoy, gana peso la idea de acometer cambios significativos. Una remodelación en materia deportiva que conllevará una importante limpieza en la plantilla, con un buen número de altas y bajas, y que podría afectar también al puesto de director deportivo, ejercido desde 2014 por Chechu Mulero. Nada está descartado. Ni siquiera que la revolución acabara afectando también al técnico, pese a los dos años de contrato que le restan. 

Mumbrú se ve con fuerzas: "No vine para un año"

Como indicó el propio Mumbrú en la rueda de prensa posterior a la derrota frente al Barça que certificó el fin de la temporada, en los próximos días se sucederán los análisis y las conversaciones entre todas las partes implicadas. "Este es un club ambicioso. No hay que tapar las heridas, es duro. El Valencia BC debe pensar y hablar conmigo, y con todos, aunque no es algo que no se haya hecho durante el año. Sabemos lo que ha pasado, aunque a veces es difícil encontrar soluciones por el poco margen de maniobra", comentó el técnico, antes de referirse a su situación: "Tengo contrato, no vine para un año, sino para un proyecto, pero tras una campaña tan dura es normal que todo el mundo piense y haga valoraciones, que no son buenas. Es hora de sentarnos y valorar. Me siento con fuerzas porque ha habido momentos complicados, sabes lo que ha pasado... el problema es cuando no sabes por qué han pasado las cosas".

Mumbrú da instrucciones al equipo en el partido contra el Barcelona

Mumbrú da instrucciones al equipo en el partido contra el Barcelona / Miguel Ángel Montesinos

Las lesiones se multiplicaron desde finales de noviembre hasta enero golpeando las posibilidades del equipo, mermadas también por el pasaporte que nunca llegó de Jasiel Rivero, obligando al entrenador a tener que dejar en la acb siempre fuera a uno de los tres extracomunitarios, principalmente, a Jared Harper. Justo hasta la serie ante el Barça, donde el que cayó fue el ala-pívot cubano.

El ‘Papi’, con una negociación abierta para renovar, publicó al mismo tiempo que se conocía su descarte un puñado de caras sonrientes en redes sociales. "Se ha confundido", dijo tras el encuentro Mumbrú, quien en marzo ya tuvo que lidiar con el caso Prepelic. Uno de los varios jugadores que dirán adiós en las próximas semanas.

Números horribles

La imposibilidad de aglutinar al grupo en la misma dirección y con una actitud comprometida ha sido un factor principal en la pésima campaña del equipo. El Valencia BC 22/23, con un balance 32-39, ha producido también el peor porcentaje de triunfos desde que comenzó a jugar en Europa en 1998. En las seis campañas previas a la actual, entre 2004 y 2021, en las que se compaginó con la Euroliga siempre fue mejor. Las cifras empujan a la renovación en el club ‘taronja’.