EUROLIGA

Golpe de autoridad del Valencia Basket en Kaunas

Los taronja arrollan al Zalgiris ante más de 15.000 espectadores con una gran defensa y un juego coral

Stefan Jovic, en el partido ante el Zalgiris en Kaunas

Stefan Jovic, en el partido ante el Zalgiris en Kaunas / Zalgiris

Jorge Valero

Jorge Valero

Con más de 15.000 aficionados en las gradas del Zalgirio Arena y el ambiente propio de una final, el Valencia Basket dio un golpe de autoridad imponiéndose a domicilio con una exhibición defensiva y ofensiva que les llevó al 72-87. Y todo ante un equipo que sólo había encajado una derrota y que pasaba por ser también una de las revelaciones de la temporada.

Los de Mumbrú no tardaron en tomar el mando del partido, de la mano de un inspirado Jones, autor de cinco puntos y de una gran asistencia a Claver para poner el 2-7.

Aunque Giedraitis respondía con un triple, la solidez taronja volvió a paracer una vez más con una defensa asfixiante y el poderío físico de Davies, Inglis y Ojeleye, que anotó su primer triple para dar oxígeno a los visitantes cuando los locales se habían puesto 12-13, tras un parcial de 5-0 con triple de Dimsa incluido.

Chris Jones, de nuevo el líder del Valencia Basket

Chris Jones, de nuevo el líder del Valencia Basket / Zalgiris

Un recuperado Jared Harper y Nate Reuvers, sobre la bocina, cerraban el primer cuarto 12-20, con superioridad en el rebote y en los porcentajes de tiro.

Sólo Josep Puerto y Jaime Pradilla se habían quedado sin jugar en los primeros diez minutos, pero una de las fortalezas de este equipo es su rotación y no tardó Mumbrú en aprovechar su profundidad de plantilla para darles entrada.

Grandes minutos de Touré y Reuvers

Unos excelsos minutos de Boubacar Touré y de Reuvers abrieron aún más la brecha en el marcador, ayudados por Ojeleye y un Harper que, desde la línea de 6,75 ayudó a romper el partido con un 19-39 que obligó a Kazys Maksvytis a parar el partido.

Evans, con un triple, intentaba volver a meter en el encuentro a los suyos, pero Jones se encargó de apagar cualquier esperanza local primero desde el 6,75 y acto seguido, con un 2+1. A partir de ahí llegó un intercambio de canastas que lo le valió a los locales para reducir diferencias e incluso el Valencia Basket llegó al descanso con su máxima ventaja después de un espectacular triple de Stefan Jovic casi desde el centro de la pista. Y de nuevo, sobre la bocina.

El 30-52 sentaba como un jarro de agua fría en una afición que cada vez lo veía más complicado ante un Valencia Basket que volvía a hacer gala de ser la mejor defensa de Europa y que sumaba ya diez anotadores distintos, con minutos para los doce jugadores convocados.

Pleno de anotadores tras el descanso

Y los dos que faltaban, Robertson y Pradilla, no tardaron en estrenar su casillero en la vuelta a la pista después de que Davies anotara dos tiros libres.

La ventaja taronja se disparaba hasta un +29 (32-61) y se hacía ya imposible pensar en una posible remontada local. Y no sólo por la diferencia, sino por las sensaciones de un Valencia Basket sólido que seguía manteniendo la intensidad defensiva pese a su gran ventaja.

Brandon Davies, en otro gran partido en la Euroliga

Brandon Davies, en otro gran partido en la Euroliga / Zalgiris

Un 2+1 de Ulanovas y un triple de Smits, el mejor local, daban oxígeno a los lituanos pero de nuevo Jones apagaba la caldera de Kaunas sumando de dos. Eso sí, no lo hizo del todo y otro parcial de 6-0 de la mano de Hayes y Dimsa obligaron a Mumbrú a parar el partido, con 44-63 a 3:24 del final del tercer cuarto.

Los taronja supieron mantener la calma y Ojeleye, Reuvers y Harper lograron que la racha no fuera a más para encarar el último cuarto con un cómodo 53-72.

Final tranquilo

Harper, con un triple y de nuevo Reuvers en el que ha sido probablemente su mejor partido de taronja, acababan por sentenciar el partido al inicio del último cuarto y aunque los locales intentaron reducir diferencias de la mano de Hayes y Evans, los taronja iban sumando con relativa comodidad, hasta el punto de no ver peligrar nunca la victoria, la cuarta de la competición que les permite ponerse segundos como colíderes sólo por detrás del Real Madrid.