Hamilton se viste de Senna en Brasil y mantiene vivo el campeonato

La Fórmula 1 es un deporte de héroes y Lewis Hamilton lo fue doblemente en Interlagos al derrotar a Verstappen y festejar su hazaña enfundado en la bandera brasileña, tal y como lo hacía Ayrton Senna.

 Antes de comenzar la cita parecía que podía ser una primera bola de partido para Verstappen. Un cero de Hamilton hubiera dejado al inglés con escasísimas opciones a seguir luchando por el título. Transcurría el fin de semana y las nubes para el británico se volvían más y más negras: sanción de varias plazas en parrilla por un obligado cambio de motor y la pérdida de todas las posiciones para la clasificación al esprint por su ilegal DRS.

Calentitos estaban en Mercedes por la severidad de las decisiones de la FIA. Tanto que Toto Wolff le soltó a Hamilton por la radio justo antes de comenzar la carrera un “Que les den a todos”. Lewis, espoleado por el mensaje, por la tenacidad que luce en su casco con la frase “Sigo en pie” y, especialmente, por un motor fresco que corría como un demonio en las rectas, fue poco a poco escalando posiciones hasta colocarse a espaldas del líder y rival Verstappen. El holandés intentó todos los trucos del manual, incluso los que no están permitidos. Max, superado por Lewis en la curva cuatro, se fue largo y los dos acabaron trazando la curva por fuera de pista. Afortunadamente, volvieron sin rasguños en la chapa. Fue una maniobra más propia de una carrera de turismos o de la Nascar, donde apoyarse en el rival es habitual, pero no lo es corriendo con monoplazas. Al holandés debió haberle caído una penalización, pero se fue de rositas, cosas de los comisarios. Verstappen, aunque es un tipo joven, sabe más que un viejo: si su rival se hubiera mantenido en lo negro, hubieran acabado los dos fuera de combate y el beneficio hubiera sido claramente para el de RedBull.

Faltan tres grandes premios y hay que agradecer a estos tipos que siga valiendo la pena ponerse delante de la tele para ver cómo diablos acaba el campeonato, especialmente, si tenemos en cuenta que dos de las tres carreras que quedan son en territorio desconocido. La capacidad de adaptación y el rápido aprendizaje de las pistas hará a uno de ellos dos campeón.