Un ‘enemigo íntimo’, cara a cara de nuevo

El técnico vuelve a cruzarse con el Valencia CF precisamente con el Athletic, equipo que lo fichó tras seis fabulosos meses en Mestalla

Valverde, en la primera jornada en San Mamés

Valverde, en la primera jornada en San Mamés

Ernesto Valverde volverá a cruzarse en el camino del Valencia CF precisamente dirigiendo al Athletic Club, el club que logró convencerlo tras seis meses fabulosos en el mando valencianista. En esta ocasión será el enemigo, aunque no hace tanto tiempo, en la temporada 2012/13, fue un claro aliado que llegó a rozar la épica en el banquillo de Mestalla cuando cogió el timón de un equipo muy irregular. Pero en la última jornada, con el viento a favor para dar la estacada final, todo se vino abajo. Sevilla-Valencia y Deportivo-Real Sociedad.

El Valencia había conseguido la cuarta plaza tan solo una jornada antes. Sin embargo, el prepartido ya arrancó de la peor manera posible, con la marcha del técnico al Athletic la siguiente campaña tras unas semanas de rumores para sorpresa del Valencia CF, que quería contar con el cacereño para su proyecto tras su buen quehacer. Todo el revuelo terminó por afectar al equipo en el Sánchez Pizjuán, que cayó por 4-3, y tras el triunfo de la Real por 0-1 en Riazor permitió al conjunto vasco asaltar de nuevo la cuarta plaza y disputar la Champions League, a la que tan cerca se quedó el Valencia CF de hacerlo.

Corría el mes de diciembre cuando una derrota por 2-5 en Mestalla ante la Real terminó por sentenciar a Mauricio Pellegrino. Tan solo un día después, el entonces presidente, Manuel Llorente, presentó al ‘txingurri’ como nuevo técnico valencianista. La jornada 15 fue el pistoletazo de salida y se cumplió el dicho de ‘entrenador nuevo, victoria segura’, con un 0-1 ante Osasuna. Aunque las dudas no tardaron en surgir tras la primera derrota en la siguiente jornada por 0-1 ante el Rayo.

Nada más lejos de la realidad, el equipo cambió el chip con Valverde, y tras el partido ante el conjunto vallecano, el Valencia encadenó diez partidos en los que tan solo cayó en Mestalla ante el Real Madrid, con tres empates y seis victorias. La racha la corto precisamente el Athletic en San Mamés, con un resultado negativo de 1-0 en la jornada 27.

El equipo funcionaba y escalaba posiciones para alcanzar Europa, lo que meses antes parecía impensable. A falta de diez jornadas, los pupilos del ‘txingurri’ merodeaban con la Europa League, y el golpe definitivo llegó con un gran final de campeonato donde consiguió 23 puntos de 30 posibles y alcanzó la cuarta plaza a falta de una jornada, que perdería tras los acontecimientos de la última y todo el revuelo que se formó alrededor de la figura del entrenador.