Baraja resucita el ADN del Valencia bronco

Sin ningún fichaje en verano que le diese ni siquiera parte del desequilibrio perdido tras la marcha de los cedidos Lino y Kluivert, Rubén Baraja fijó desde la pretemporada el objetivo de construir un bloque lo más competitivo posible desde el ADN histórico del Valencia CF. Prototipo de equipo bronco, sólido en defensa y en posesión de uno de los mejores porteros de la Liga. Eizaguirre, Abelardo, Cañizares... o el último arquero con el que los blanquinegros accedieron a la Champions League, el brasileño Neto. 

Carente de atacantes consolidados en la élite, por obra y desgracia de Peter Lim, las posiciones europeas se hallan demasiado lejos a falta de una sola jornada para la conclusión de la primera vuelta. El ‘Pipo’, sin embargo, ha dotado a su Valencia de un espíritu combativo que hoy le permite mirar tranquilo, gracias a una renta de diez puntos, la zona de descenso que delimita el Celta. La solidaridad defensiva de cada actor en el campo y el crecimiento de Giorgi Mamardashvili, meta sobre el que ponen los ojos grandes clubes de Europa, son los principales fundamentos, sin olvidar la puntería de Hugo Duro, de los 23 puntos conseguidos.

A falta de estrellas individuales, trabajo, equilibrio y un plan táctico definido. En Vallecas, después de una intervención colosal del portero georgiano a los diez minutos del duelo, el Valencia logró la primera portería a cero de la temporada lejos de Mestalla. Fue el segundo partido en 30 desplazamientos en el que los valencianos pudieron volver a casa sin encajar ningún gol. Una situación que no se vivía desde el 0-2 con el que los de Baraja comenzaron a resucitar la pasada campaña en Elche en el mes de abril. Como local, en cambio, el Valencia sí ha logrado blindarse desde el inicio del curso. Por ello, hoy Mamardashvili suma seis porterías a cero en 18 jornadas. Las Palmas (1-0), Atlético (3-0), Cádiz (2-0), Granada (1-0), Celta (0-0) y Rayo (0-1). 16 de los 23 puntos. 

Los pupilos de Baraja han ido corrigiendo las deficiencias defensivas a balón parado y en centros laterales. Una mejora en la que el progreso en las salidas aéreas del georgiano ha sido clave. En la actualidad, Giorgi es el quinto guardameta de la competición con más despejes efectuados por alto. El portero de 23 años, además, está cuajando una campaña a la altura de los mejores de la Liga. Solo cuatro hombres han encadenado más porterías a cero que el arquero del Valencia: Unai Simón (8), Álex Remiro (7), David Soria (7) y Stole Dimitrievski (7).

Más porterías a cero desde 2018

A esta altura de competición, tras 18 fechas disputadas, el Valencia no acumulaba seis partidos sin encajar goles desde el segundo año de Marcelino. Por entonces, cinco con Neto y uno con Jaume Domènech. Mamardashvili, en menos de media Liga, se encuentra a solo una portería a cero de los siete que hizo en toda la temporada pasada y a dos de su mejor registro, las ocho del curso 21/22. Durante la era Lim, Diego Alves alcanzó 13 encuentros sin recibir tantos en la Liga 14/15, mientras que Neto alcanzó los diez dos veces, en la 17/18 y la 18/19.

Un éxito sellado por el portero, pero en realidad fruto de la labor defensiva del equipo entero. Salvo las debacles en el Villamarín (3-0) y el Bernabéu (5-1), la presión constante en defensa ha complicado la vida a sus rivales y ha llevado al Valencia a competir por la victoria en la mayoría de enfrentamientos. Con una media inferior a los diez (9.8), los valencianistas son los que menos remates por partidos conceden por delante del Barcelona (10.6), Athletic (10.6), Alavés (10.6) y Real Madrid (10.7). El conjunto de Mestalla, de hecho, con un promedio de 8.9, es el segundo que más balones intercepta por el momento, solamente mejorado por el Betis (9.3). Así como el cuarto que más entradas realiza, 18.2, por detrás de Sevilla, Mallorca y Las Palmas, o el quinto con más despejes.

El valor de una buena defensa

A partir de los valores defensivos, el Valencia de Baraja ha mejorado en esta primera parte de la Liga su imagen en relación con el de la pasada temporada. El mítico exjugador del club tuvo claro desde el principio su idea de construir desde la retaguardia, no obstante, necesitaba las semanas de pretemporada para fortalecer las bases. Los blanquinegros han recibido hasta el momento 22 goles, 1,22 por partido. Un promedio empañado por los cinco goles que encajó del Real Madrid, aunque mejor que el de las campañas 19/20, 20/21 y 21/22. Solo superado por el del curso pasado tanto en la jornada 18 (1,16) como en la 38 (1,18), en la que el ‘Pipo’ cogió las riendas en la 22, en Getafe. Hace más de medio año la defensa salvó al VCF del infierno de la Segunda y, a día de hoy, lo sustenta en la zona media.